La confianza de los consumidores alcanzó su punto más bajo en octubre, con solo el 33.8% de los encuestados reportándose positivos sobre su situación económica, financiera y de empleo.
Este dato marca la confianza más baja reportada desde el inicio de la encuesta (octubre de 2021), representando una caída significativa desde el 44.6% registrado en julio.
Las Mayores Preocupaciones de los Consumidores
La principal inquietud de los encuestados es el estado de la economía, señalada por el 57.20%. La criminalidad se sitúa en el segundo lugar con un 54.90%, seguida de cerca por el costo de las utilidades con un 54.70%.
Otros temores significativos incluyen:
- Salud Mental: 53.50%
- Inflación: 41.80%
- Seguridad de ingresos y de empleo: Ambas con 40.00%
- Vivienda Asequible: 32.80%
¿Dónde Reducen Gastos los Consumidores?
Para comprender cómo los puertorriqueños ajustan sus presupuestos ante la incertidumbre económica, se analizaron las categorías con mayores recortes de gastos.
Los recortes más pronunciados se observan en mejoras y renovaciones al hogar (47.88%), un gasto que tiende a posponerse en tiempos de incertidumbre. Le siguen de cerca los gastos en comida fuera del hogar (47.22%), reflejando ajustes directos en el consumo diario para proteger el presupuesto familiar.
La categoría de Ropa y Zapatos (43.88%) también muestra una reducción significativa, lo que sugiere una priorización de solo lo esencial. Además, el 34.08% de los encuestados está gastando menos en electrónicos, lo que confirma que las compras grandes o discrecionales están siendo aplazadas.
Otros ajustes relevantes en el gasto incluyen:
- Turismo interno o viajes al exterior: 31.40%
- Comida para el hogar: 30.29%
- Consumo de luz y agua: 27.62%
- Inversiones: 22.94%
- Cuidado personal:19.82%
- Entretenimiento fuera del hogar: 18.49%
Un 17.82% de los encuestados indicó que “no le sobra para ahorrar”. Por otro lado, la única categoría donde el 0.00% reportó recortes es la de Suscripciones y Membresías (Cable, Netflix, Planet Fitness, etc.).
Los datos reflejan que la confianza del consumidor se encuentra en un punto históricamente bajo. Los recortes se concentran en gastos mayores como mejoras del hogar, comida fuera del hogar y ropa, el bajo porcentaje de ajustes en cuidado personal y entretenimiento fuera del hogar muestra que los consumidores se rehúsan a sacrificar el bienestar personal. Además, el hecho de que ninguna persona recortara suscripciones y membresías sugiere que estos servicios se han consolidado como consumos esenciales y difíciles de eliminar, incluso ante la incertidumbre económica.








