El empleo es uno de los indicadores más importantes para evaluar la salud de la economía, ya que refleja cuántas personas están activamente participando en la producción de bienes y servicios, el nivel de ingresos en los hogares y la capacidad de consumo en el país. Su seguimiento permite entender si la economía está creciendo, estancada o en retroceso.
Durante abril de 2025, el mercado laboral en Puerto Rico mostró estabilidad. El total de personas empleadas se mantuvo en 1,167,000, sin cambios con respecto a marzo. Esta cifra representa un aumento de 25,000 empleos frente a abril de 2024, cuando había 1,142,000 personas trabajando, y un incremento de 56,000 en comparación con abril de 2023, cuando se registraron 1,111,000 empleos.
La fuerza laboral total, que incluye tanto a personas empleadas como a aquellas que buscan empleo activamente, también reflejó un alza. En abril de 2025 alcanzó las 1,235,000 personas, frente a 1,213,000 en abril de 2024 y 1,184,000 en abril de 2023.
La tasa de desempleo se ubicó en 5.5% por segundo mes consecutivo, tras haber permanecido seis meses en 5.4%. Esta tasa sigue por debajo del 5.9% registrado en abril de 2024 y del 6.1% en abril de 2023. En términos absolutos, había 68,000 personas desempleadas en abril de 2025, frente a 71,000 en 2024 y 72,000 en 2023.
El empleo asalariado no agrícola también mantiene una tendencia positiva, aunque con menor dinamismo. En abril de 2025 se registraron 962,000 empleos asalariados no agrícolas, un leve aumento frente a los 960,900 de marzo. En lo que va del año, se han añadido 3,200 empleos en este renglón. En comparación anual, se observa un alza de 8,500 empleos respecto a abril de 2024 (953,500) y de 21,600 frente a abril de 2023 (940,600).
No obstante, el ritmo de crecimiento se ha desacelerado si se compara con años anteriores. Entre abril de 2023 y abril de 2024 se añadieron 12,900 empleos asalariados no agrícolas. Esa cifra fue de 24,300 entre 2022 y 2023; 49,400 entre 2021 y 2022; y 99,400 entre 2020 y 2021.
El empleo en Puerto Rico se mantiene estable, con más personas trabajando que en años anteriores y con una tasa de desempleo en niveles históricamente bajos. Sin embargo, la desaceleración en la creación de nuevos empleos asalariados podría ser una señal de cautela frente al ritmo de crecimiento económico en los próximos meses. Aun así, el mercado laboral sigue mostrando solidez, lo cual es positivo para la economía general del país.