La expectativa de una transición a un mundo libre de Covid19, ha chocado con una peligrosa guerra entre Rusia y Ucrania, y una inflación mundial histórica, así como duros precios en el petróleo. La combinación de varios factores económicos globales han creado una situación atípica para las empresas y los consumidores puertorriqueños.
Quiero destacar que esta situación debe ser temporera, pero nos invita a repensar la manera en que planificamos las finanzas de nuestros hogares para poder salir airosos de lo que parece ser una tormenta perfecta.
En este artículo, quiero explicar de manera sencilla y puntual cómo la combinación de cinco factores nos afecta y cuando veremos algún regreso a la normalidad.
La excesiva impresión de dinero
Cuando el virus del Covid-19 comenzó a apoderarse del mundo, el cierre de las economías obligó a las principales economías industrializadas a imprimir dinero e implementar políticas monetarias expansivas para asegurar que los ciudadanos y las empresas mantuvieran un nivel de liquidez aceptable. Se estima que a nivel global se inyectaron $19 trillones mediante la impresión de dinero nuevo a la misma vez que las tasas de intereses se bajaban a casi cero.
El gobierno federal inyectó casi $5 trillones en la economía vía las famosas rondas de cheques de estímulos a las familias, y subsidios directos a los trabajadores y las empresas. En el caso de Puerto Rico, entraron $20,000 millones que tuve el efecto de crear un poder adquisitivo artificial y provocó cambios en las conductas del consumidor.
La inflación
Las masivas inyecciones de dinero pandémico creó un disloque entre la demanda y la oferta, aumentando más rápido el suplido de dinero que la producción real en la economía, y, por ende, empujando los precios a niveles históricos y peligrosos niveles de liquidez. En el caso de Estados Unidos, la inflación se encuentra en 8.6%, el nivel más alto en cuatro décadas, mientras que, en Puerto Rico, se encuentra en 5.1%, el más alto en tiempos recientes. En renglones como la energía, y la comida, el cambio interanual en los precios se ubica entre el 30% y 20%, respectivamente.
El disloque global del mercado de petróleo
El mayor golpe al bolsillo del consumidor viene de un aumento en el precio del petróleo que durante el 2021, tuvo un precio promedio de $40 el barril, y luego del inicio de la guerra en Ucrania, llegó a $125. Las presiones globales asociadas a la recuperación de la economía mundial, y los problemas de oferta de los principales países exportadores de petróleo se han agravado con la guerra en Ucrania. Los altos precios del petróleo han provocado que, en la Isla, el litro de gasolina se ubique en 1.20 el litro, golpeado sin piedad el bolsillo boricua.
La guerra en Ucrania
Por último, lo que nadie vio venir, la agresión de Rusia a Ucrania que comenzó un poco más de hace dos meses. Este conflicto con implicaciones regionales y globales ha tenido el efecto de encarecer aún más el precio del petróleo, toda vez que Rusia es unos de los principales productores de petróleo y gas natural. Por otro lado, Ucrania, al ser uno de los mayores productores de granos y fertilizantes del mundo, pudiera crear serios problemas en el mercado mundial de alimentos. Se estima que 50 millones de personas pudieran enfrentar hambre, en la región de África el Medio Oriente.