El Índice de Precios al Consumidor (IPC) es una medida que refleja la variación promedio en el tiempo de los precios de una canasta de bienes y servicios que consumen los hogares. Es uno de los principales indicadores utilizados para evaluar la inflación y el costo de vida en una economía.
En marzo de 2025, el IPC en Puerto Rico aumentó a 137.43, reflejando un alza anual de 0.9% en comparación con el nivel de 136.14 registrado en marzo de 2024. Este fue el incremento más bajo desde el periodo entre febrero de 2020 y febrero de 2021, cuando la inflación fue de apenas 0.5%, lo que indica una significativa desaceleración en el ritmo de crecimiento de los precios.
El ritmo actual contrasta con el registrado entre marzo de 2023 y marzo de 2024, cuando el IPC aumentó 2.5%, evidenciando una desaceleración más pronunciada en el último año.
En un análisis de más largo plazo, el IPC acumulado entre marzo de 2020 (119.07) y marzo de 2025 (137.43) muestra un aumento de 15.4% en solo cinco años. Este incremento supera al alza de 12.8% registrada durante los doce años previos, entre marzo de 2008 (105.57) y marzo de 2020 (119.07). Estos datos evidencian una marcada aceleración en los precios durante el periodo posterior a la pandemia.
A pesar de estas alzas, el poder adquisitivo del dólar del consumidor en Puerto Rico se mantuvo en 0.73 durante marzo de 2025, sumando 13 meses consecutivos de estabilidad en este indicador. Este comportamiento sugiere que, aunque los precios continúan siendo altos, el ingreso real de las familias no ha sufrido deterioros significativos recientemente.
Aunque la inflación muestra señales de moderación, los niveles de precios siguen siendo elevados en comparación con la etapa prepandémica. La reciente desaceleración representa una señal positiva, pero el desafío persiste para muchas familias que aún enfrentan un costo de vida considerablemente alto.